Posiblemente hayas escuchado decir algo como «Valladolid es tierra llana y seca, aquí no hay nada». Nosotros hemos venido a contradecir y a demostrar hasta que punto se equivocan. Por esta y por otras muchas razones, hoy te enseñamos el embalse de La Santa Espina o embalse del Río Bajoz.
A continuación te explicaremos brevemente la historia del lugar, tanto del embalse como del monasterio y el pueblo. Si no te interesa, pincha aquí para ir directamente a la ruta.
Embalse de La Santa Espina o embalse del Río Bajoz, su historia
En la década de 1950, la necesidad de agua para regar las tierras de este valle hizo que el entonces Servicio de Concentración Parcelaria construyera el Embalse de La Santa Espina o también llamado embalse del Río Bajoz.
Con el tiempo, su finalidad inicial ha dejado de existir y hoy es un hábitat donde se dan cita un buen número de especies animales que pueden ser observadas si se cuenta con la paciencia necesaria. Ánades, azulones, fochas, garzas y cormoranes son sólo algunas de las especies de aves que pueden verse por las orillas y que buscan cobijo entre espadañas, pinos, robles y encinas acompañados de jaras, tomillos y torvisco.
Breve historia del pueblo
El municipio de La Santa Espina fue creado a mediados del siglo pasado por el ministro de agricultura para contribuir al desarrollo agrario de la zona. Para ello, se edificaron 50 viviendas además del edificio del ayuntamiento y las escuelas entre otros.
De entre las 70 personas que habitan el lugar, podemos encontrar a algunos de los primeros que llegaron a este rincón de Valladolid en busca de un futuro. La mayoría de estas personas procedían de municipios cercanos como Castromonte, San Pelayo o Torrelobatón.
El Monasterio de la Santa Espina
El Monasterio de La Santa Espina lo mandó construir Sancha de Castilla en el año 1147. Esta infanta obtuvo una espina de Jesucristo, de ahí su nombre. En el mismo año llegaron los primeros monjes cistercienses y, entre ellos, su hermano.
Como la mayoría de estos edificios, se construyó en diversas fases y sufrió diferentes reformas. La sala capitular, de finales del siglo XII, fue construida con la sencillez propia del cister. De la misma época son la sacristía y la biblioteca claustral. En 1275 dieron comienzo las obras de la iglesia con planta de cruz latina y tres naves.
La fachada de la iglesia y sus dos torres son de mediados del s. XVII. Ya en el interior, resaltan los dos claustros, el claustro de la hospedería y el claustro regular, ambos del s. XVII. En la capilla mayor, se combinan el estilo gótico y renacentista donde destaca el retablo, procedente del Monasterio de Retuerta Valladolid que es del siglo XVI.
El Monasterio ha sobrevivido a momentos difíciles como el incendio de 1731 que destruyó la biblioteca y gran parte del edificio, la invasión francesa o la desamortización de Mendizábal que ocasionó la salida definitiva de los monjes en el año 1835. El monasterio está declarado Bien de Interés Cultural desde el año 1931.
Embalse de La Santa Espina como llegar
Para llegar al Embalse de La Santa Espina o embalse del Río Bajoz desde la autovía A-6 hay tomar la salida en dirección San Cebrián de Mazote por la VP-5012. Una vez tomada la VP-5012, habrá que conducir durante 12 km sobrepasando el citado pueblo de San Cebrián para a La Santa Espina. Puedes aparcar tu vehículo en el pueblo o en el Monasterio, que se encuentra a pocos metros del casco urbano.
Ruta por el Embalse de La Santa Espina o embalse del Río Bajoz
Nuestros pasos hacia el Embalse de La Santa Espina comienzan en el propio pueblo, nada más aparcar el coche. A escasos metros del monasterio, nuestros pasos se dirigen desde el primer minuto hacia la ruta a seguir.
Por tanto, en dos minutos llegamos a la fachada del monasterio, atravesamos su muralla y tomamos el camino que nos llevará en dirección al pantano.
El aparcamiento del Embalse de La Santa Espina
Tras salir del recinto del monasterio a través de un hueco en sus muros, tomamos una pista en buen estado que nos lleva directos al embalse. En este lugar puedes dejar también el coche si lo que quieres es solamente dar un paseo alrededor de la balsa de agua.
Desde este punto, en cosa de cinco o diez minutos, estarás a orillas del embalse de La Santa Espina, disfrutando de la calma y tranquilidad que este rincón de Valladolid ofrece.
La ruta continúa
Junto al camino, podemos ver los restos de lo que fue la acequia que regaba los campos de este valle situado a los pies de los Montes Torozos. Hoy se encuentran en desuso y mal estado de conservación, muchas veces perdidos entre la vegetación.
Embalse de La Santa Espina
Nada más llegar nos encontramos con un cartel que nos informa de toda la fauna que aquí podemos encontrar. Esta zona, rica en fauna, nos ofrece la posibilidad de avistar corzos, conejos, jabalíes, tejones, zorros, lobos…
También aves como la lechuza, el mochuelo, el halcón peregrino, la perdiz o la paloma e incluso algunas ligadas a la vida en el agua como la garza, la garceta, el martín pescador, el ánade, la focha el azulón e incluso cormoranes como el de la imagen, que posa tranquilo al sol en uno de los puestos de pesca.
Seguimos caminando por la orilla del agua mientras observamos a los ánades alimentarse de forma tranquila y las huellas dejadas por el jabalí tras escarbar el terreno. A lo lejos, vemos como una garceta sobrevuela la lámina de agua en la misma dirección a la que nosotros nos dirigimos.
El Embalse de La Santa Espina es una pequeña masa de agua que se recorre fácilmente por lo que, en poco tiempo, ya estamos dando la vuelta por la otra orilla. Según giramos, vemos como el monte es aprovechado en esta zona para la apicultura, otra de las riquezas de esta parte de la meseta castellana.
Embalse de La Santa Espina, por el otro lado
Entre pinos y quejigos, nuestros pasos discurren cerca de las espadañas situadas a las orillas de este pantano. De repente, entre los troncos de los árboles, una mancha blanca llama poderosamente nuestra atención. Es una garceta, la misma que minutos antes sobrevolaba el embalse con su volar parsimonioso.
Tratamos de fotografiarla pero esta ave es huidiza, esquiva y desconfiada. No queremos asustarla por lo que nos emboscamos entre la maleza para tratar de fotografiarla. La belleza de este animal nos mantiene largo rato observando como se mantiene inmóvil entre la vegetación.
Pasado un rato, quizá por sentir nuestra presencia o quizá movida por otra razón, parte de nuevo. Tenemos la oportunidad de fotografiarla en pleno vuelo, despidiéndonos de ella y sabiéndonos muy afortunados por haber avistado un animal de semejante belleza y valor biológico.
Nuestros pasos continúan junto al embalse antes de realizar un giro que nos adentrará, tras una pequeña subida, en una zona de encinar. Desde este punto, tomamos un sendero paralelo a la carretera y desde la que divisamos gran parte del territorio que tenemos alrededor. Esta es una de las cosas que tiene la meseta y su perfil plano, permite observar el paisaje perdiéndonos en el horizonte, a varias decenas de kilómetros.
Un poquito más adelante, cruzamos la carretera para acercarnos poco a poco hasta el monasterio y el pueblo de La Santa Espina. Antes de llegar, divisamos una torre. Se trata de una torre de vigilancia y prevención de incendios que domina toda la loma de este rincón de los Montes Torozos.
Después, tras levantar la vista, observamos como las apuntadas torres de la fachada del monasterio rasgan las nubes y tratan de alcanzar el cielo, ese que hemos tocado apenas unos minutos antes mientras caminábamos por este jardín del edén en medio de lo que antaño se denominaba Castilla la Vieja.
Embalse de La Santa Espina en Wikiloc
Si lo que necesitas es el track para realizar la ruta de Cascada de Las Pisas, aquí te lo dejamos.
¿Lo sabías? Usamos nuestro móvil como GPS
Utilizamos la app IGN del Instituto Geográfico Nacional y nos descargamos los track desde Wikiloc para tenerlos siempre en nuestro móvil de forma totalmente gratuita.
¿Cómo se hace?
Es muy fácil. Tras instalar la app de IGN en tu móvil, descargas desde wikiloc el track de la ruta.
Previamente, habrás tenido que crear una cuenta en Wikiloc con tu correo y nombre de usuario.
Posteriormente, descargas el track de la ruta en formato GPX. Tendrías que verlo así en tu móvil. Al ponerte en marcha, sólo tendrás que seguir las flechas.
Recomendaciones para visitar el embalse de La Santa Espina
- Aunque sea una ruta sencilla, lleva una mochila con ropa, agua y comida.
- Llévate unos primaticos si dispones de ellos, lo vas a disfrutar mucho.
- En esta zona no está permitido el vuelo de drones.
- Respeta a los animales, intenta que tu visita no altere su comportamiento.
- Llevarse los residuos siempre.
Embalse de La Santa Espina, lugares cercanos
Muy cerca, a apenas unos pocos minutos, te recomendamos visitar los siguientes lugares:
- Tiedra, el pueblo de los campos de lavanda.
- Urueña, la villa del libro amurallada.
- Tierra de Campos: tradición, palomares y adobe.
Nuestra experiencia en el Embalse de La Santa Espina termina aquí. Si te apetece, puedes ver más viajes en nuestro perfil de Instagram y resto de redes sociales.
Si crees que alguna información que ofrecemos no es correcta, por favor escríbelo en comentarios. También nos encantaría que compartieses eso que estás pensando con nosotros.