Las Pasarelas del Mondego es una ruta de la que habíamos visto y escuchado mucho. Para visitarlas nos desplazamos hasta Guarda, en la Serra da Estrela, Portugal.
Te contamos la ruta y después tratamos de resolver todas tus dudas.
Las Pasarelas del Mondego, la ruta
La ruta de las Pasarelas del Mondego comienza junto a la presa, en una caseta y un arco de madera identificados para tal fin.

Justo antes de cruzar el arco y acceder al recorrido, una de las personas encargadas de recibirnos escanea nuestras entradas.

Pasarelas del Mondego, inicio de la ruta y Mirador Mocho Real
Con ganas, comenzamos subiendo al Mirador Mocho Real donde podemos observar una preciosa panorámica de todo el valle que forma el río Mondego por esta parte de Portugal.

Por delante nos esperan algo más de 12 km en una ruta que no debería plantearnos mayor dificultad.

El otoño asoma ya aunque de forma tímida por estas tierras. Nosotros, impacientes, nos lanzamos cuesta abajo desde el mirador hacia el primer tramo de pasarelas.

Pasarelas del Mondego, comienzan las escaleras
Nada más pasar el primer tramo, comienza una bajada que contiene unos cuantos escalones. No es demasiado duro pero si conviene tomarlo con calma.

Como la bajada se encuentra en los primeros metros de la ruta, nuestras piernas se pueden resentir y notar el esfuerzo. Repetimos que es sólo un tramo y que éste no es demasiado largo pero tómatelo con calma.

De vez en cuando, echamos la vista atrás y lo que vemos nos parece precioso. Las pasarelas junto a la roca, forman una simbiosis que se nos antoja perfecta.

La bajada tiene premio y nada más terminar nos encontramos con una pequeña cascada.
Cascata do caldeirão
Tras terminar el tramo de escalones, nos desviamos unos metros hacia nuestra izquierda y observamos un precioso salto de agua que lleva las aguas del Ribeira do Caldeirão hacia el cauce del río Mondego.

Pasarelas del Mondego, la ruta continúa
Tras visitar la cascada, regresamos a la ruta y continuamos. Apenas hemos recorrido 500 metros y a este ritmo dormiremos en las pasarelas, por lo que decidimos apretar el paso para tratar de avanzar un poco.

Otra sorpresa en el camino
Unos metros más adelante, vemos como la estructura de madera por la que caminamos se adentra en la vegetación.

El verde inunda nuestros sentidos y miremos por donde miremos todo está tapizado de este vivo color.

Seguimos adentrándonos en este desvío y nos encontramos otra imagen idílica que nos regala este rincón de Portugal.

Pasarelas del Mondego, la ruta debe continuar
Regresamos al camino a seguir y tan sólo tenemos que preocuparnos de continuar por el paseo de madera y seguir encontrando señales como ésta.

Las pasarelas se terminan pero el camino sigue rodeados de pinos y montañas. El día está muy bonito y la temperatura de momento es agradable.

De pronto, llegamos a un pequeño pueblo llamado Vila Soeiro donde nos cruzamos con otros caminantes que vienen en sentido contrario que vienen comiendo un helado.

De repente, nos miramos y nos echamos a reír. A la vez pensamos: «daríamos lo que fuera por comernos un helado, un polo de lima limón».

En Vila Soeiro, el Pintos bar nos resuelve el problema. Junto a la camioneta, vemos el cartel de los helados que este lugar ofrece y entramos con un rayo al interior del establecimiento.

Mientras nos comemos el helado, nos adentramos por un camino rodeado de una naturaleza frondosa.

Pasarelas del Mondego, la Nova Fábrica
La denominada fábrica nueva contaba con seis telares y se situaba a un kilómetro de la llamada fabrica vieja. Este lugar estuvo dedicándose al hilado y cardado de la lana de oveja desde el año 1935 hasta 1965.

Hoy en día, se pueden admirar sus restos y la obra de un Martín Pescador pintado en uno de sus muros maestros. También, si lo deseas, puedes bañarte en las aguas de los Pozos del Mondego, una zona habilitada de baño.

Pasarelas del Mondego, zona de control y merendero
Una vez pasada la fábrica y pasamos la zona de baño, llegamos a una zona de control e información.

También en este punto podemos encontrar mesas donde parar a comer y también aseos o servicios.

Pasarelas del Mondego, el sol aprieta
Tras tomar de nuevo las pasarelas, nos damos cuenta de que el calor nos está pasando factura.

Es mediodía, el sol cae a plomo sobre nosotros en un terreno donde no hay refugio posible. Estamos en un extraordinariamente caluroso día de octubre donde las temperaturas alcanzan los 38 grados.

De momento intentamos administrar el agua que nos queda y tratar de avanzar todo lo que podemos en un terreno que no nos concede tregua.

Quizá, la distancia que nos queda hasta el final se nos haga un poco largo pero trataremos de avanzar poco a poco.

Central Hidroelétrica do Pateiro
El 1 de enero de 1899, la ciudad de Guarda fue la tercera ciudad portuguesa en disponer de alumbrado público y fue esta central hidroeléctrica la que proporcionaba la energía.

La presa de Pateiro, y el canal proporcionaban un salto de agua de 45 metros que dotaba del movimiento necesario a las turbinas.

Pasarelas del Mondego, descontando kilómetros
En un momento dado, echamos la vista atrás. Nos damos cuenta de que hemos recorrido más distancia de la que pensamos y calculamos que nos quedan aproximadamente 5 tórridos kilómetros.

Por el camino, nos vamos encontrando con otros senderistas que también llevan el sufrimiento reflejado en el rostro y que, como nosotros, aprovechan cualquier oportunidad para descansar a la escasa sombra que encontramos.

El terreno que no deja de ser un soleado valle desprovisto de arboleda, permite en todo momento divisar el camino que tenemos por delante.

Quizá, esta falta de vegetación de mayor porte cuya sombra hoy hubiéramos agradecido, hace que podamos contemplar la faraónica obra realizada para que podamos caminar por este paraje.

Engenho do Pateiro
Tal y como hemos visto, a lo largo del río Mondego hay gran número de factorías en ruinas. Aunque todas pararon sus máquinas a mediados del siglo pasado, podemos observar cuantiosos vestigios y restos de molinos y estructuras que aprovechaban la fuerza motriz generada por el agua. No será la última que veamos en esta ruta de las pasarelas del Mondego, en la Serra da Estrela de Portugal.

Pasarelas del Mondego, los puentes colgantes
Tras dejar atrás la última factoría, nos encontramos un par de puentes colgantes. La verdad es que si te gustan estas estructuras, aquí vas a disfrutar bastante.

No hemos cruzado un puente y ya nos encontramos con el siguiente. Aprovechamos en este lugar para parar un poquito, beber un poco y descansar unos minutos a la sombra.

La casa de las abejas o un milagro caído del cielo
Tras parar a descansar para reponernos un poquito del calor, descubrimos que unos metros más adelante se encuentra un pequeño establecimiento situado cerca de la localidad de Trinta. Dos simpáticos burros nos reciben y esperan nuestras caricias.

En este lugar, reponemos el agua de nuestra mochila y tomamos un refresco frío que nos da la literalmente la vida. También debemos señalar un detalle importante.

En un día como caluroso como hoy, podría habernos cobrado lo que hubiera querido y el importe total ha sido 5.5€ por dos botellines de agua y un refresco. Emprendemos de nuevo la marcha en dirección a Trinta donde nos encontraremos con algunas fábricas más.

Pasarelas del Mondego, Engenho do Ribas
Siguiendo el sendero, llegamos a un puente. Al otro lado del río encontramos el Engenho do Ribas. Esta fábrica fue edificada en 1890, sufrió un grave incendio en 1930 y cambió de dueños hasta su cierre definitivo en 1960. Junto a la factoría, observamos la vivienda de los maestros.

En este punto, aprovechamos para refrescarnos en el aseo instalado para las personas que realizan la ruta de las Pasarelas del Mondego antes de seguir hasta la siguiente industria.

Fábrica de Marruecos
Construido a mediados del siglo XIX, el edificio que debió ser impresionante en su la época, sigue en pie entre la maleza. En este lugar se realizaban todas las operaciones relacionadas con la fabricación de mantas de lana, desde la recepción de la materia prima hasta la salida al mercado del producto final.

Pasarelas del Mondego, otro puente colgante
Los metros pasan a mayor velocidad desde que paramos metros más atrás a tomar un refresco y la vegetación nos protege del sol.

No obstante nuestra alegría dura poco y regresamos a caminar por terreno más despejado. Para continuar, cruzamos otro puente tibetano.
Pasarelas del Mondego, la parte final a contrarreloj
El paisaje, aunque despejado, parece cambiar a orillas del río Mondego quizá por la presencia de un mayor caudal. Por otro lado, nuestro siguiente punto de la ruta ya será la parada final, Videmonte.

En un momento dado consultamos la hora y, aunque en esta última parte hemos apretado el paso, no hemos avanzado lo suficiente. Las pasarelas del Mondego cierran a las 17h y son las 16:30h por lo que a este ritmo, no llegamos.

Así, con cierto agobio pues no vemos a nadie venir detrás de nosotros, aumentamos el ritmo. Nuestra intención es la de coger a un grupo bastante numeroso que va delante.

Engenho dos Carriços
En esta zona encontramos la última de las fábricas que aquí se encontraban en el siglo pasado.

La naturaleza va conquistando cada uno de sus rincones dotándole de ese aire místico y romántico que tienen los lugares abandonados.

Comenzamos a subir un tramo de escaleras y para descansar, echamos la vista atrás. El paisaje es impresionante y posiblemente en unas semanas la gama cromática de este entorno se llene de tonos ocres y en primavera experimente una explosión de color.

Otro tramo de escaleras, el último. Igual que Stairway to Heaven (escalera al cielo) de Led Zeppelin, subimos los últimos peldaños para poner fin a esta aventura por tierras de Portugal en esta ruta por las Las Pasarelas del Mondego en la Serra da Estrela. Estamos exhaustos.
Conclusiones finales sobre las Pasarelas del Mondego
Realmente, la dureza de esta ruta no ha venido por el terreno o nuestras condiciones físicas. Seguimos opinando que es una ruta de una dificultad moderada para quien camina habitualmente pero las altas temperaturas nos han pasado factura.

También cabe destacar el excelente trabajo de señalización que han realizado durante toda la ruta donde, si te fijas, puedes encontrar información de forma continua en el pasamanos de las pasarelas como la distancia recorrida o la proximidad de aseos y servicios.

Características de la ruta de las Pasarelas del Mondego
Ruta: lineal.
Nivel de dificultad: Moderado.
Desnivel: 527 metros aproximadamente.
Distancia: 12.4 km.

Las Pasarelas del Mondego, preguntas frecuentes
Es posible que te estés haciendo algunas preguntas acerca de las Pasarelas del Mondego.
Si la ruta es lineal, ¿cómo regreso?
Una vez terminada la ruta, hay taxis esperando para que los visitantes puedan regresar al punto de partida. El precio del viaje de vuelta en taxi son 15 euros.

¿Dónde empiezan las pasarelas de Mondego?
La ruta de las Pasarelas del Mondego o los Passadiços do Mondego comienzan junto a la Barragem do Caldeirão o la presa de Caldeirão que fue construida en 1988 para abastecer de agua a la localidad de Guarda. El recorrido pasa por los pueblos de Trinta, Vila Soeiro y termina en Videmonte.
¿Dónde están las pasarelas de Mondego, Portugal?
Las Pasarelas de Mondego se encuentran en Guarda, un municipio portugués a dos horas de Salamanca y cuyo territorio está reconocido como Geoparque Estrela por la UNESCO. Se trata de una ruta lineal de unos 12 km junto al cauce del río Mondego que pasa por lugares como Barragem do Caldeirão, Trinta, Vila Soeiro y Videmonte.
¿Cuántos escalones tiene la pasarela de Mondego?
Tanto el tramo inicial como el tramo final cuentan con numerosos escalones. En su parte final, las pasarelas cuentan con unos 500 escalones aproximadamente, si bien son muy llevaderos.

Las Pasarelas del Mondego, aparcamiento
Nos trasladamos desde Guarda hasta el lugar exacto donde comienza la ruta. Muy cerca de allí, existe una explanada habilitada como aparcamiento donde dejamos nuestro vehículo de forma totalmente gratuita.

Y justo al lado, han preparado unas casetas de madera que son los aseos.

Alojamiento en las Pasarelas del Mondego, donde dormir
Nosotros decidimos alojarnos en Guarda, un lugar con bastante oferta para comer y alojarse. Concretamente, nos alojamos en Nº7 Sacadura Cabral, una especie de hostel muy limpio y acogedor donde la persona que lo lleva es adorable.

Las Pasarelas del Mondego en Wikiloc
Aunque la ruta está totalmente señalizada, no está de más llevar la ruta en el teléfono por precaución.
¿Lo sabías? Usamos nuestro móvil como GPS
Utilizamos la app del Instituto Geográfico Nacional y nos descargamos los track desde Wikiloc para tenerlos siempre en nuestro móvil de forma totalmente gratuita.

¿Cómo se hace?
Es muy fácil. Tras instalar la app de IGN en tu móvil, descargas desde wikiloc el track de la ruta.

Previamente, habrás tenido que crear una cuenta en Wikiloc con tu correo y nombre de usuario.

Posteriormente, descargas el track de la ruta en formato GPX. Tendrías que verlo así en tu móvil. Al ponerte en marcha, sólo tendrás que seguir las flechas.

Portugal, un destino excelente
Portugal es un destino que nos encanta y que nos gustaría conocer mucho más. De momento, en este blog puedes visitar estos lugares:
- Oporto, la portuguesa coqueta.
- Braga, que ver y hacer en un día.
- Guimaraes, el lugar donde nació Portugal.

Rutas de senderismo en España
Si lo tuyo es el senderismo, aquí podrás conocer un montón de rutas en España.

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