Toledo es conocida como la ciudad de las tres culturas ya que convivieron en armonía judíos, cristianos y musulmanes. Si te planteas visitar España, ciudades como Toledo, Mérida o Sevilla no pueden faltar en tu ruta. Si por el contrario, vives en España como es nuestro caso, Toledo es la escapada perfecta.
Desde que salimos de casa, tardamos unas dos horas y media en llegar a nuestro destino.
Aparcamos cerca del Castillo de San Servando pues no queremos meter el coche intramuros. En Toledo las calles son estrechas y un poco laberínticas.
Nuestro primer objetivo es llegar al mirador del valle por lo que tenemos por delante una buena caminata.
Rodeando la ciudad siguiendo el curso del Río Tajo, nos dirigimos hacia el Alcázar que es el museo del ejército. Antes nos paramos a contemplar el Puente de Alcántara y nos viene a la cabeza todas las películas sobre el medievo.
Nos imaginamos a los caballeros sobre sus caballos cruzando el puente… Sin tiempo que perder, entramos a conocer Toledo por la puerta que lleva el mismo nombre…
Muy cerquita del Alcázar, se encuentra el Museo de Santa Cruz cuya fachada es digna de dedicarle al menos unos minutos.
Desde aquí decidimos dirigirnos a la Puerta de la Bisagra. Después, queremos ver varias sinagogas y el Monasterio de San Juan de los Reyes.
Desde la Puerta de la Bisagra, decidimos ir a la Puerta del Cambrón para, a continuación, acudir al citado punto de la ciudad.
El nombre de cambrón proviene de una planta arbustiva llamada cambrón o cambronero que, en la época de su construcción, crecía por la zona. Esta puerta también era denominada Puerta de los Judíos, pues por este lugar se accedía a la judería toledana.
Tras caminar apenas cinco minutos, llegamos al Monasterio de San Juan de los Reyes. Este lugar nos quedó pendiente de visitar en nuestra anterior visita a Toledo, y es verdad que por fuera no parece gran cosa.
Por dentro todo cambia y el lugar nos deja literalmente con la boca abierta, uno no sabe a donde dirigir la mirada.
El monasterio se construyó por orden de los reyes católicos en estilo gótico isabelino. Es curioso porque este lugar iba a ser una colegiata y futuro mausoleo de los reyes, y al final, no fue ni una cosa ni la otra.
Tras conocer el Monasterio de San Juan de los Reyes, teníamos claro que queríamos volver a Toledo. Edu también quería regresar a la Sinagoga de Santa María la Blanca. Le fascina este pequeño pero coqueto lugar…
No disponemos de todo el tiempo que no gustaría por lo que nos dirigimos rápidamente a la Sinagoga del Tránsito, actual Museo Sefardí.
Nuestra sorpresa es monumental, cuando llegamos a la puerta y descubrimos que los domingos por la tarde no abren. ¿y para que nos venden la pulsera un domingo?
Tras el chasco, no queda más remedio que poner rumbo al Museo Casa del Greco que también la encontramos cerrada. Creemos que este sobre este tema, Toledo debería plantearse ciertas cosas.
Sobre la marcha, cambiamos los planes y nos acercamos hasta la Iglesia del Salvador. El mayor reclamo de esta iglesia con más de mil años de antigüedad, es una una pilastra de origen visigodo.
El resto de nuestra visita a Toledo transcurre perdidos entre callejuelas, hasta que nos damos de frente con el Real Colegio Doncellas Nobles, cuyo interior es digno de visitar.
El Cardenal Silíceo fundó el Real Colegio Doncellas Nobles. Tras su muerte, se convirtió en su lugar de descanso eterno. Aunque, sin duda, una de las imágenes más conocidas de este edificio es esta galería.
Seguimos nuestra visita por Toledo y no faltan los grupos de chinos, que van en masa de un punto a otro, a velocidad de vértigo.
Nosotros nos dirigimos hacia la catedral, que será nuestra última parada en la ciudad de las tres culturas.
Sin duda, la catedral es un buen lugar donde terminar nuestra visita a Toledo. Muchos eran los lugares que nos quedaban por conocer en anteriores visitas y alguno todavía queda para ocasiones futuras. En nuestra opinión, ésta es una ciudad con mucho duende y que hay que conocer si o si.
Y tú, ¿ya la conoces? déjanos tu respuesta en los comentarios.
Si te parece nos puedes dejar un comentario, nos haría muy felices.
Chicos, muy bueno el post, me lo apunto, para cuándo vayamos a Toledo!!
Que ganas de ir.
Muchas gracias!!
Nos alegra mucho que te haya gustado. Toledo es una ciudad que por mucho que se visite, siempre descubres rincones nuevos. Muy recomendable para una gran escapada. Un abrazo 😉
Me gusto mucho haber conocido Toledo demasiada historia ,bellisima 👏💯🇲🇽
Toledo es una ciudad muy bonita donde siempre que vamos descubrimos nuevos rincones que antes no conocíamos. Gracias por dedicar parte de tu tiempo en leernos. Un saludo.