Gwalior es una ciudad poco turística del estado de Madhya Pradesh pero que nos pilla de camino hacia Agra, así que tras ver fotos en internet, decidimos incorporarla a nuestro plan de viaje por India.
Cuando dices que pararás en Gwalior, la gente dice fundamentalmente dos cosas:
- «¿Gwalior? ¿Dónde está eso?»
- Y… «¿qué se os ha perdido en Gwalior?»
Pues bien, aquí estamos en Gwalior y vamos a contaros nuestra experiencia. Luego cada uno puede sacar sus conclusiones y decirnos si sois del «¿qué se os ha perdido en Gwalior?» o si por el contrario os encanta este lugar.
Fuerte de Gwalior
No podemos empezar en otro lugar que en el Fuerte de Gwalior. La fortaleza, que es del siglo VIII, es ocupada parcialmente por la familia Scindia para la educación de la nobleza hindú.
Lo primero que vemos al acceder al recinto es un templo que fue dedicado a Shiva. En el siglo XVI, cuando los mogoles conquistan el fuerte, lo utilizaron como prisión. Actualmente, como podéis observar, está abandonado.
Caminamos unos metros y por fin nos encontramos ante la tercera fortaleza más grande de India, el Fuerte de Gwalior.
Tras pasear por los alrededores del Fuerte, sacamos la entrada correspondiente y subimos unas escaleras para acceder al Man Singh Palace, un palacio de estilo hindú que algunos conocen como el Palacio Pintado o Chit Mandir.
El palacio fue construido sobre un acantilado de 100 metros de alto en el año 1508 por el rajá Man Singh Tomar y en su fachada vemos elefantes, cocodrilos y tigres y patos, estos últimos están dedicados al dios Brahma.
Además, el palacio cuenta con cuatro pisos de los cuales dos son subterráneos, y con varios patios decorados.
Se trata de uno de los mejores ejemplos de arquitectura hindú con hermosas pinturas y azulejos de colores.
¡Nos parece increíble estar aquí e imaginar como tuvo que ser esto hace unos años!
Cada rincón esta finamente decorado con tallas y figuras, todo realizado en piedra arenisca.
Tras conocer los diferentes patios y estancias, nos damos cuenta de que se nos ha pasado media mañana, por lo que vamos rápidamente a visitar los Sas Bahu Temple o templos de la suegra y de la nuera.
Templos Sas Bahu
Los Templos Sas Bahu son del siglo IX – XI. El Templo de la Suegra está dedicado al dios Visnu, y es de mayor tamaño que el Templo de la Nuera.
Justo al lado, nos encontramos el Templo de la Nuera, en honor al dios Shiva. Ambos templos están totalmente llenos de figuras y adornos tanto por dentro como por fuera.
Tenemos los templos casi para nosotros solos, pues apenas hay algún guardia del complejo. Todo es paz y tranquilidad, los templos y los jardines y, a nuestros pies, la ciudad de Gwalior.
Tras hacer unas cuantas fotos para que podáis disfrutar al igual que nosotros de este lugar, seguimos hasta alcanzar la puerta oeste.
Esculturas jainíes
Cerca de los templos están las esculturas jainíes, así que… ¡allá vamos!
Podemos encontrar este tipo de figuras en varios lugares del recinto pero las de la parte oeste son las más impresionantes.
Estas figuras que fueron talladas en el siglo XV y destruidas por los musulmanes en el siglo XVI, han sido restauradas hace poco tiempo.
Las figuras representan a los maestros jainíes que enseñaron el camino jainista o 24 tirthankars. Estos seres alcanzaron la trascendencia y liberación y son un ejemplo a seguir.
Nosotros no pretendemos alcanzar la liberación, pero si esperamos que os haya gustado Gwalior.
Precio: 300 rupias (incluye Man Singh Palace, Sas Bahu Temple y Teli Temple)
Ahora tenemos que reanudar nuestra ruta para llegar a Agra, y seguir compartiendo este viaje con vosotros.
Estupenda información. Sin adornos superfluos.
Gracias Virgilio! Saludos viajeros!
Se ve muy bien! Lo tendré presente si alguna vez ando por allá.
Muchas gracias Camila! Esperamos verte a menudo por aquí! Saludos viajeros!