Es viernes noche, una mezcla de viento frío y lluvia nos hace presagiar que venimos en la fecha equivocada a la montaña palentina. No tenemos ni idea de todo lo que nos espera…
Mapa de la montaña palentina
Tras llegar al Parador de Cervera de Pisuerga, dejamos las maletas y bajamos corriendo a cenar.
El menú que nos han preparado nos hace disfrutar como nunca, ¡qué delicia!

Al día siguiente…
Montaña palentina y románico
La berrea en Rebanal de las Llantas
Nos levantamos muy temprano y nos dirigimos a Rebanal de las Llantas. Llegamos de noche, allí nos espera Manuel de Valles y Cumbres con café caliente y bizcochos. Una breve explicación y nos ponemos en marcha.

Caminamos a oscuras mientras escuchamos los primeros sonidos de la berrea. Manuel viene provisto de prismáticos para que no nos perdamos nada y avistamos algunos ciervos de gran tamaño.

Acto seguido nos lleva a conocer el hayedo de Camporredondo, donde nos explica algunas de sus peculiaridades. Nuestro guía es un pozo de sabiduría que nos ofrece una clase de botánica instantánea.

Tras un breve paseo, la mañana nos tiene preparada la segunda sorpresa de la jornada. Decimos la segunda porque la primera es el día primaveral que estamos disfrutando.

¿De qué trata la segunda sorpresa? Pues de coincidir con otro equipo de personas admirables: los chicos de Cocina de Altura.
Cocina de Altura
Ni cortos ni perezosos nos hacen, en medio de la montaña, huevos fritos con morcilla y panceta para matar el hambre.

Y es que como alguien dijo: «no digo que lo superes pero iguálamelo«. Imposible, aquí en la montaña palentina se está requetebién.

Tras reponer fuerzas, toca levantar el campamento y regresar a Rebanal de las Llantas. Por el camino vamos conversando con los amigos de Palencia que tanto nos han hecho disfrutar.

Una vez en Rebanal, regresamos a Cervera de Pisuerga.
Nos damos una ducha, y nos asomamos a la ventana. Las vistas del embalse de Ruesga desde el Parador de Cervera de Pisuerga son espectaculares.

Eremitorio rupestre de San Vicente
En Cervera, visitamos uno de sus lugares más icónicos, la ermita de San Vicente, la cual está rodeada de una necrópolis y tiene de fondo la montaña palentina. Este lugar aparece documentado por primera vez en el año 818 y como podéis apreciar se conserva en muy buenas condiciones.

Tras conocer la zona, nos dirigimos a comer al Restaurante Peñalabra. Cabe destacar dos cosas: lo riquísimo que está todo y las molestias que se toman para hacer que nuestro día sea especial.

Ya por la tarde, dedicamos nuestro tiempo al románico de la zona. Nosotros ya lo conocemos y sabemos que es espectacular. José María Peridis, arquitecto y dibujante, ya hace años puso en valor esta zona y no se confundía enseñándonos cada rincón, que al natural impresiona más todavía.
Moarves de Ojeda
La primera parada la realizamos en la iglesia de San Juan Bautista de Moarves de Ojeda. Esta iglesia del siglo XII fue declarada monumento Nacional en 1931. Nos quedamos un buen rato observando su pórtico ¡es una joya!

Muy cerca se encuentra el Monasterio de San Andrés de Arroyo.
Monasterio San Andrés de Arroyo
El Monasterio de San Andrés de Arroyo fue fundado por la condesa Doña Mencía en torno al año 1181 y declarado Monumento Histórico Artístico en 1931. No es nuestra primera visita ni será la última a este Monasterio de monjas cistercienses, cuya comunidad sigue habitando y cuidando del mismo.

Todas las fotos se quedan cortas para mostrar la belleza de este lugar a medio camino entre el románico y el gótico.

Aguilar de Campoo
La última parada del día nos lleva hasta Aguilar de Campoo. Recorremos sus calles mientras atardece y visitamos varios lugares, como la Plaza de España y la Colegiata de San Miguel.

El castillo, la Ermita de Santa Cecilia, la puerta del Hospital y el Palacio de los Manrique, son otros lugares que no podemos perdernos en nuestra visita por Aguilar de Campoo.
Posada Santa María La Real
Después de un intenso día es hora de cenar y lo hacemos en la Posada Santa María La Real, en el Convento de Santa María La Real ¿con qué nos sorprenderá ahora la gastronomía palentina?

No podemos engañaros… ¡nos hemos puesto las botas! Es hora de retirarse a descansar.
Aventura y geología
Nos levantamos pronto, desayunamos y nos dirigimos a Barruelo de Santullán, antigua zona minera en la montaña palentina.

Parque ferroviario Barruelo
Llegamos al Parque Ferroviario de Barruelo dispuestos a pasar una mañana de aventuras. La primera actividad que hacemos es una ruta en buggy por los alrededores. ¿Sabías que muy cerca, en Vallejo de Orbó, se abrió el primer cine de la provincia de Palencia?

Y tras la ruta en buggy… ¡tiro al arco! En ambos casos… ¡disfrutamos como niños!

La gente del Parque Ferroviario es muy atenta con nosotros y hacen que el tiempo se nos pase volando. Desde Barruelo nos marchamos hasta Pomar de Valdivia.
Cueva de los Franceses
Nos adentramos en las profundidades de la montaña palentina para descubrir la Cueva de los Franceses, en el Geoparque de las Loras.

La cueva fue descubierta por un sacerdote en 1904 y en su interior se encontraron los restos de soldados franceses de la Guerra de la Independencia, de ahí su nombre: Cueva de los Franceses.
Convento de Mave
Nuestra última parada tiene lugar en el Convento de Mave en el que disfrutamos de una exquisita comida, ¡cómo se come en esta zona!

Con el estómago lleno, y el buen sabor de este gran fin de semana, es hora de volver a casa. Sin duda, ¡volveremos a Palencia!
Todas estas actividades han tenido lugar durante la QuedadaxPalencia. No queremos terminar este artículo sin dar las gracias a:
- VisualCreative por confiar y creer en nosotros.
- PalenciaTurismo por hacerlo posible.
- Autocares Duque por transportarnos cómodos y seguros.
Hay muchos lugares en la provincia de Palencia que merecen una visita, aquí os dejamos alguno de los que conocemos y os recomendamos:
- Montaña palentina y lugares de cuento
- Románico palentino en la comarca de la Ojeda
- Románico palentino en torno al embalse de Aguilar
- Tejeda de Tosande
También nos puedes dejar un comentario y recomendarnos otros lugares que creas que debemos conocer en esta maravillosa provincia de Palencia.
Wow! Que forma más bonita de descubrir las maravillas que tenemos en Castilla y que apenas conocemos. ¡Habrá que hacer una visita pronto a la montaña Palentina! 😉
Hola Laura! Aprovecha ahora, en otoño se pone precioso todos sus parajes naturales! Gracias por tu comentario! Un abrazo!
Leyéndolo me he trasladado a todos esos lugares que conocimos en la Montaña Palentina y, he revivido todas las buenas experiencias de esos días en vuestra compañía. Ojalá podamos repetir algo similar.
Un abrazo
Estamos seguros de que volveremos a coincidir ya disfrutar de vuestra compañía, nada nos haría más felices. Un abrazo.
En verano vivo en esta zona
Pues no sabes la envidia que nos das! Es una zona fantástica!