Muchas veces nos habíamos propuesto visitar Las Médulas y nunca terminábamos de concretar el plan. ¡Pero por fin ha llegado el día!. Nos hemos acercado hasta este rincón de El Bierzo, en la provincia de León, para recorrer este paraje.
¿Cómo llegar a las Médulas?
Es muy posible que vengas desde Ponferrada por la A6. Si es así, deberás coger la N-536. En este caso, nuestro consejo, es que como tienes que pasar por Carucedo hagas una pequeña parada y veas el Lago Carucedo. La arena y los lodos de la explotación minera de Las Médulas obstruyeron la canalización hacia el río Sil formándose este lago artificial. Con este detalle empezaremos a comprender la visita que nos espera.
Mapa de las Médulas
Si has llegado hasta aquí con intención de visitar Las Médulas, lo primero que debes saber es que existen distintas rutas.
- Senda perimetral (5,7 Km)
- La Senda de las Valiñas (4 Km)
- Senda de Reirigo (5,5 Km)
- La Senda del Lago Sumido (3km)
- Senda de Los Conventos (4.5 Km)
Nosotros te proponemos realizar un combinado de estas sendas tal y como hacemos nosotros. La mejor forma de entender nuestro recorrido es con el mapa que os dejamos a continuación.
¿Dónde aparcar en Las Médulas?
Nada más llegar, tendrás que dejar tu vehículo en el aparcamiento de la entrada. Hay huecos de sobra para todos, así el pueblo de Las Médulas quedará libre de tráfico rodado conservando así su encanto.
Ruta por Las Médulas
Una vez que hemos dejado el coche, atravesamos todo el pueblo. Dejamos la Iglesia de San Simón y San Judas Tadeo a la izquierda y vamos por el camino que nos indica Guía de Visitantes continuando todo recto.
Cuando llegamos al inicio de la ruta veremos de frente una valla de madera pero justo antes, a la izquierda observamos unas señales. Nuestro objetivo es empezar por la «Senda de las Valiñas» pero no vamos a coger el camino que atraviesa la valla sino el que sale a la izquierda donde indica que es la senda corta y hay sólo 1,3 Km hasta La Cuevona.
Nada más comenzar a caminar, ya vislumbramos Las Médulas. Vemos como se asoman, entre la vegetación del lugar, los montículos arenosos que caracterizan este rincón de El Bierzo.
Tras apenas quince minutos caminando por senderos en buen estado llegamos a La Cuevona.
La Cuevona
Se trata de una gran oquedad de enormes proporciones practicada por los romanos para la búsqueda de oro. Es aún mayor de lo que imaginábamos y hace que valores realmente las dimensiones del trabajo que aquí se realizaba. Una vez que estamos frente a La Cuevona, saltamos la valla y subimos la cuesta por un pequeño sendero que ya se ve que ha atravesado más gente para poder contemplarla de cerca.
¿Cómo se formaron Las Médulas?
Las Médulas no se han formado por la acción geológica sino por la mano del hombre. Para que entiendas un poco como se formaron, te explicamos brevemente y con un pictograma el proceso.
¿Cómo extraían los romanos el oro de Las Médulas?
El proceso comenzaba con el embalsado de gran cantidad de agua en la parte superior mientras se excavaban las galerías.
Posteriormente, se producía una gran descarga de agua que hacía que se rompieran las galerías y colapsara el terreno. El agua arrastraba todos los materiales y se producía su separación por decantación. El agua procedente de este proceso formó el Lago Carucedo que podemos ver cerquita de este entorno.
Nuestros pasos continúan en dirección al Mirador de Orellán que indica que está a 1,8 km.
Fuente de la tía Viviana
Tras unos pocos metros, llegamos a un punto donde unos carteles indican que el sendero sigue por una cuesta que se adentra en el bosque. Antes de iniciar la subida, observamos una fuente de piedra, es la Fuente de la Tía Viviana.
Desde este punto comienza una pequeña subida por el bosque de castaños y robles. Quizá ésta sea la parte más dura del recorrido, por eso te recomendamos que te lo tomes con calma y que disfrutes de cada detalle que te brinda la naturaleza. Cierra los ojos y siente cada aroma, cada trino, cada bocanada de aire, las prisas no te servirán de nada.
Mirador de Orellán
Tras la subida, llega la recompensa. Giramos a la izquierda y vemos un vallado de madera que nos deja unas vistas espectaculares. Pensábamos que era el Mirador de Orellán pero no, para llegar a él, debemos continuar unos pocos metros más.
Un poquito más adelante tenemos unas escaleras a la izquierda que van a subir al mirador y a mano derecha una indicación hacia las Galerías de Orellán.
Galería de Orellán
Puede parecer la típica atracción para turistas pero lo cierto es que lo tienen muy bien ambientado. Ya que hemos subido hasta aquí y vamos bien de tiempo, decidimos bajar. Un casco, un poco de cuidado y entramos.
Precio:
- 3 € para adultos.
- 2 € para niños.
Horario:
- Mañanas de 11.00 a 14.00h todo el año.
- Tardes, siempre abren a las 16.00h, pero el cierre varia entre las 17.30 y las 20.00h en función de los meses.
Tened en cuenta que los martes está cerrado.
Salimos de la Galería de Orellán y reemprendemos la marcha. Es el momento de desandar el camino para coger la ruta perimetral. De regreso vemos la cuesta por la que hemos subido y la dejamos a mano derecha para continuar recto por la senda. Ahí mismo hay un cartel en el que nos indica hacia dónde debemos ir para llegar al área recreativa de Campo da Braña (que es continuar todo recto).
Campo da Braña
Este es el lugar ideal para hacer una parada técnica y comer un bocadillo en las mesas que hay. Desde el Campo da Braña cogemos el cortafuegos que sale de forma perpendicular a la Senda Perimetral y que sube al Pico Reirigo. En esta subida comienza la parte de la ruta en que recorremos la Senda de Reirigo.
La Senda Reirigo, la zona más bonita de Las Médulas
Posiblemente, esta zona sea la más bonita de todo lo que vamos a recorrer esta tarde en Las Médulas. Desde que llegamos a lo alto del Pico Reirigo, tras una breve subida, los paisajes son espectaculares.
Por un lado tenemos las vistas de la Galería de Orellán y por el otro, una panorámica de estas montañas de El Bierzo que poseen esta luz tan especial.
Nosotros seguimos caminando por esta vereda hacia las Cuevas de Reirigo. El camino es poco menos que un cresteo por estos picos y montes, de ahí que las vistas sean increíbles. No debemos aflojar el ritmo, la tarde se nos echa encima y no queremos que se nos haga de noche.
El sol cae y lo baña todo de una luz dorada mientras somos conscientes de que estamos viviendo un momento único. Encinas, brañas y demás flora se visten de gala con colores imposibles de describir con palabras.
A lo lejos, distinguimos el Lago Carucedo. Este lago se formó como resultado de las aguas vertidas en la explotación minera de Las Médulas. ¡Ay Bierzo! ¡Pero que bonito eres!
Queremos avanzar, acercarnos al pueblo de nuevo pero también que este momento dure para siempre. Veo a Irene extasiada ante la inmensidad y se me viene a la cabeza la estrofa de Un bolero en Berlín donde dice:
No te quiero sumisa, te quiero libre
Subir esa montaña y sentir la brisa
Soñar con el caribe...
Un poco más adelante, no sabemos si fruto del síndrome de Stendhal o qué, llegamos a una bifurcación y tenemos ciertas dudas ya que si nos perdemos, tendremos que hacer noche al raso. Cogemos el camino de la derecha y pronto llegamos a las cuevas.
Cuevas de Reirigo
Aunque veo a Edu con ciertas dudas, el camino que elegimos es el correcto. Es lo que tiene que no suela planear las rutas… Por fin me deja la cámara, ¡No todas las fotos las va a hacer él!
Al final del todo, cuando llegamos a las cuevas, la senda se acaba y tenemos que bajar por unas escaleras de madera.
Caminamos unos metros para incorporamos a La Senda Perimetral. Desde este momento el camino es recto y no tiene pérdida. Además, antes de incorporarnos a esta senda, pasaremos por un cartel indicativo.
La Senda Perimetral
Llegamos a la Senda Perimetral y en estos momentos estamos a media hora del pueblo por lo que tendríamos que tener muy mala suerte para no llegar. El cartel indicativo nos explica que estamos a 1,2 km del Mirador de las Perdices y a 3,5 km del pueblo de Las Médulas.
Nuestro siguiente destino es el Mirador de las Perdices, lo tenemos muy cerquita. Si no llegamos, si nos encuentran mañana en el monte, tendremos que explicar que nos quedamos hipnotizados viendo atardecer.
Mirador de las Perdices
El último de los miradores de esta Ruta por Las Médulas es el Mirador de las Perdices y antes de llegar sabemos porqué. Una perdiz se acaba de cruzar en nuestro camino con toda la calma del mundo.
Desde este lugar podemos observar como el pueblo y el entorno se unen para algo único. No sobra mucho tiempo para llegar…
Por eso decidimos apretar el paso e intentar llegar con los últimos rayos del sol. La ruta termina pero nuestro camino continúa.
Lago Somido y Laguna Larga
Nada más entrar al pueblo, no paramos, queremos ir al Lago Somido. Tenemos que recorrer 1,3 km para llegar por lo que cogemos el primer desvío a la izquierda por la calle Camino Lago Somido. Hay que ir andando, no está permitido el acceso con vehículo.
Laguna Larga
A este paso, nos comen los lobos pero es que nos daría mucha rabia estar aquí y no visitar los lagos. Apretamos el paso, queremos llegar como sea. Casi de noche, llegamos a la Laguna Larga.
Lago Somido
Un poquito más adelante, encontramos el Lago Somido. La paz que hay en estos momentos es abrumadora y decidimos disfrutar cinco minutos de su paz en profundo silencio.
A lo lejos, vemos como se encienden las primeras luces en el pueblo y nos rodea la oscuridad más absoluta. Llegamos de noche pero esta experiencia y esta ruta ya no nos la quita nadie.
Las Médulas con niños
Se pueden visitar las Médulas con niños. Si los niños son muy pequeños quizá lo mejor es evitar la Senda Reirigo, pues es ella hay posibilidad de caída a distinto nivel y el camino es más complicado.
Si por edad o por que no están muy acostumbrados a andar consideráis que la ruta que os proponemos es muy larga, os damos otra opción:
- Realizar sólo la seda de las Valiñas (4 Km).
- Visitar el mirador de Orellán y las minas de Orellán accediendo a ellas con el coche.
Siempre que no estén muy cansados podréis disfrutar después del Lago Somido y la Laguna Larga.
¿Dónde comer en Las Médulas?
En el pueblo de Las Médulas tienes muchos establecimientos que ofrecen distintos menús y la mayoría rondan los 12 euros entre semana. Suponemos que en fin de semana este precio es superior y el menú, diferente.
Los menús ofrecen de 4 a 6 primeros y de 4 a 6 segundos, pan, bebida (agua, gaseosa, vino) y postre. ¿Qué más se puede pedir?
Distancia Las Médulas a Ponferrada
Si como nosotros, decides alojarte en Ponferrada, debes saber que la distancia entre ambos puntos es de 25 km y unos 35 minutos de duración.
Alojamiento en Ponferrada, ¿Dónde dormir?
Tras la ruta, decidimos dormir en Ponferrada. Nos alojamos cerquita del centro en un hotel muy acogedor a un precio bastante bueno, 45 euros. Se trata del Hotel El Castillo que como su nombre indica, se encuentra junto al Castillo Templario.
Nada más llegar, nos pegamos una ducha y nos vamos a cenar. Hemos observado que mucha gente recomienda un restaurante llamado El Provocón 2021. Este local se encuentra en la calle San Juan Apóstol, 14 pero son las 23:30h y no sabemos si nos darán de cenar.
¿Dónde comer en Ponferrada?
Entramos y el hombre que regenta el local nos recibe con la mejor de las sonrisas. Tomamos un plato combinado riquísimo y para rematar, una tarta de queso y un smoothie a base de fresa y plátano espectacular. Así que apunta, El Provocón 2021.
Otros lugares que te recomendamos si te gusta disfrutar de la naturaleza en la provincia de León son:
- Cascada de Cantejeira, Ancares Leoneses.
- Faedo de Orzonaga, ruta fácil por León.
- Casares de Arbas: Ruta por su embalse.
- El Faedo de Ciñera de Gordón.
- Valle de Arbas, paraíso desconocido.
Esta ha sido nuestra experiencia en Las Médulas, esperamos que te haya gustado. Si es así, recomienda y comparte este artículo con familiares y amigos. Por otro lado puede que, sin saberlo, hayamos cometido algún error o incluso que tengas alguna recomendación, en cuyo caso nos gustaría que nos lo hicieras saber en los comentarios.
Enhorabuena, Eduardo, espectacular el reportaje sobre la zona, la información sobre la misma y todos los detalles para información del viajero, yo conozco la zona, pero me quedaron muchas cosas por ver, por cierto me hice la foto con Jesús. Calleja en esa zona en Molinaseca,bueno felicitarte por tu gran trabajo sobre Las Médulas, hasta pronto.
Muchas gracias Jesús. Todo el mérito es de Irene que es realmente la persona que ha diseñado la ruta, ha realizado parte del texto y tomado muchas de las fotografías. Irene es el cerebro de esta operación en El Bierzo y Las Médulas. Un abrazo y gracias por tu comentario.
Al final se os hizo de noche, aunque las vistas del atardecer son extraordinarias. Magnífico reportaje de unos de los parajes más impresionantes del Bierzo
Saludos.
Así es, se nos hizo de noche pero la luz de este lugar nos regaló un atardecer de película. Es impresionante toda la zona de Las Médulas y El Bierzo en general. Gracias por tu visita y tu comentario. Un abrazo.